CRÍTICA DE CINE FANTASMAGÓRICA...

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domingo, 28 de febrero de 2010

AN EDUCATION

No se ni porque me molesto en ir al cine a ver determinadas películas, con lo valioso que es el tiempo de un fantasma. Supongo que es que me aburro de ulular y arrastrar cadenas... "An education" no tenía mala pinta; guión de Nick Hornby ("Alta fidelidad"), buenos actores, una temática interesante...pero acaba resultando la típica peli de época previsible e innecesaria. Veamos por que. La historia: Chica de 16 años en un barrio inglés gris y mediocre apasionada por la cultura francesa y con furores uterinos tiene que elegir entre la mediocre educación de Oxford o la que le ofrece su particular Pigmalion, un Peter Saarsgard con más aspecto de rijoso que nunca. (Este hombre me desconcierta, su cara siempre esta a medio camino entre el sueño, la esquizofrenia y el asco) En esta ecuación por supuesto todos los que representan a la educación clásica son estúpidos (su padre, su madre, sus profesoras) y los amigos del rijoso resultan ser lo más cool e inteligentes del mundo. En otras palabras, muy simplista todo. La historia va avanzando en una línea tediosa, donde parece que prima más cierta nostalgia por una época que el hecho de contarnos algo o provocarnos alguna emoción, dos cosas que no se consiguen. El final, claro, se veía venir desde el minuto uno y en el camino nos hemos dejado escenas de verguenza ajena, como la del plátano(¿?¿?) o el pasaje en Paris, que parece un anuncio de ropa de principios de los 90. Lo único destacable de la peli es la prota Carey Mullligan, una de esas caras que conquistan la cámara, pero que no puede salvar tal desproposito. Con lo que yo me pregunto...¿De verdad merece esta sosería tal avalancha de críticas buenas -yo lo flipo con algunos críticos- tantas nominaciones, premios y demas fanfarria? Yo, como buen fantasma, desde luego la hubiera hecho mucho mejor...

miércoles, 24 de febrero de 2010

martes, 23 de febrero de 2010

THE HURT LOCKER

Lo bueno del paro es que me estoy tragando todas las pelis de la temporada Oscars. Y os doy buena cuenta de ello. Katrhyn Bigelow siempre contó con mi simpatía. Películas de acción entretenidísimas, trepidantes como "Le llaman Bodhi", "Acero azul" o la memorable "Dias extraños", sin más pretensiones pero en su género muy buenas. Cuando se puso pretenciosa con "El peso del agua" se dió el batacazo y ahora parece haberse reinventado con un drama bélico y realista, sin concesiones ni discursos políticos. De hecho, el tono deocumental de la película, su sobriedad y sequedad, su renuncia a lo espectacular y a los grandes momentos dramáticos la hacen de dificil adhesión, por lo que me sorprende el éxito que esta teniendo en premios varios. Bigelow retrata la guerra como un trabajo, un trabajo peligroso y duro, pero un trabajo. Y al artficiero protagonista como un adicto a la adrenalina del peligro que conlleva su profesión. (La adrenalina es el tema principal de las películas de Bigelow). En este sentido resulta memorable la escena en la que ha vuelto a casa y se encuentra en un supermercado ante la tediosa e irritante tarea de elegir unos cereales de un stand enorme. El protagonista se siente cómodo y relajado haciendo su trabajo en Irak y en un infierno en ese supermercado, lo cual puede ser una crítica velada de mucho más calado que otros mensajes políticos más evidentes y facilones. Filmada con una cámara nerviosa y aspera, "The hurt locker" merece la pena -entre otras muchas cosas- solo por el memorable plano final, de esos que captura toda la esencia de una historia con precisión de francotirador.

PRECIOUS?

"Precious" tiene el tufillo de la cinta presuntamente "indie" que todos los años que se cuela en los Oscars. Los ingredientes son conocidos; una historia con contenido social -preferentemente con minorias étnicas sufriendo-, un presupuesto bajo-aunque avalado por la guru Oprah Winfrey, alguna cara conocida que se reivindica como actor (solo de pensarlo me da risa recordar a Mariah Carey haciendo de...Asistente Social.... y a Lenny Kravitz haciendo de enfermero enrollao y como no, buenorro). Luego la presentamos en Sundance, ese festival taaan indie y seguro que las nominaciones llueven. Es más, seguro que le dan el oscar a mejor guión, que es como una forma de decir lo original que es. En este caso es la historia de una chica negra, gorda, violada, maltratada, con sida...Ya que estamos la podrían haber puesto parapléjica, sordomuda, ciega y que le gustara Kenny G. Por supuesto se encuentra a una profesora-lesbiana, como no- que sabrá ver sus cualidades y le enseñará el camino a seguir. "Precious" es aburrida, plana, carente de emoción, con unas escenas oníricas de verguenza ajena y una estética más que feista, fea. Soy de los que opinan que cualquier historia bien contada puede ser una buena película, pero esto es de juzgado de guardia. Lo siento, soy apasionado con las pelis, para bien y para mal...

SHUTTER ISLAND

Scorsese parece poseido por una mezcla de Lynch y Kubrick en esta perturbadora reflexión sobre la locura. Un thriller-película de terror-drama que te deja trastocado a la salida del cine, con sensaciones encontradas y con numerosas preguntas acerca de su intrincada trama, lo cual ya es meritorio hoy en día. "Shutter Island" es una pirueta arriesgada, esta todo el rato en caminando por el alambre, a punto de perder el equilibrio, aunque uno se pregunta si una película sobre el desequilibrio mental tiene que ser equilibrada. Excesiva, por momentos se ve debilitada por la clara intención de hacer una obra maestra, por el exceso, pero con momentos de brillantez brutal, con una música, fotografía y montaje excelentes y con un gran merito: es una película diferente que oscila entre la aparente contradicción de ser comercial y bizarra, palomitera y radical, hermosa y retorcida. La verdad es que DiCaprio no me acaba de convencer, es uno de esos actores que compensa sus limitaciones con su entusiasmo y su libertad para elegir buenos directores y buenos papeles, que por lo menos tiene buen gusto. Pero el resto del reparto esta genial; Ben Kingsley, sublime actor, el pequeño papel de Max von Sydow, Mark Ruffalo, etc...Especial mención merece la música, machacona y repetitiva, que, como todos los elementos del film, te mete en la visión delirante y paranoica de la locura que ofrece Scorsese. El director ya dejó atras su gloriosa etapa de mafia y cristianismo y demuestra ser un director enorme, sin aparentes límites en una filmografía enorme y cuyos siguientes pasos son sencillamente impredecibles.

THE ROAD

La carretera es la vida, un trayecto constante cuyo final ya conocemos de antemano. Aunque parezca lo contrario, "The road" no es una denuncia ecologista-apocalíptica. Es una película que habla sobre la supervivencia, sobre la raza humana casi como una especie animal en peligro de extinción, el hombre como un lobo para el hombre. Sin embargo hay alusiones directas al cambio climático: en una secuencia de esta durisima y estupenda película, el personaje de Robert Duvall, un viejo harapiento corroido por la desesperanza afirma: -Yo sabía que iba a pasar esto. Lo sabía hace años. Pero siempre hubo escépticos que lo negaron. ¿No os suenan esos escépticos? Pero como digo "The road" es fundamentalmente una historia de amor -entre un padre y su hijo- puesto al límite, de enseñanza, de sacrificio. Una película emocionante, sobria y altamente simbólica. Otro peliculón, vaya. Ultimamente estamos de suerte.

LA CINTA BLANCA

Los grandes cambios comienzan por lo más pequeño. "La cinta blanca" es la última película de Michael Haneke y se podría decir que es una obra maestra. Narra con una elegancia y dureza tremendas los extraños sucesos acontecidos en un pequeño pueblo alemán poco antes del comienzo de la Primera Guerra Mundial. La película habla del germen de la violencia y del odio, el miedo y de como una educación estricta, fría y ausente de cariño puede generar futuros (¿O no tan futuros?) asesinos. Filmada con un maravilloso blanco y negro, que explora nuevas posibilidades narrativas-todo tiene un aspecto onírico, irreal-, tiene una realización y dirección de actores memorables. Mención especial merece la escena en que un niño chico le pregunta a su hermana mayor por la muerte, es sencillamente una maravilla de escena, emocionante, tierna, dura, probablemente la que mejor recoja la temática de "La Cinta blanca". El miedo genera miedo, la violencia, más violencia. Haneke se muestra en esta película más sutil, dejando espacio para la sugestión al espectador-nunca se da nada mascado, no acaba de quedar totalmente claro lo que ha pasado-, rozando la maestría, creando una clásica pero moderna obra de arte. No se que más decir, salvo que la veáis.

AVATAR

Las primeras imágenes de "Avatar" impactan por su fuerza y sus hipnóticos efectos especiales. Durante la primera hora uno asiste medio hechizado a un espectáculo mastodóntico, pero sobre todo se deja llevar por una historia original y que plantea temas interesantes, como la posibilidad de tener un "Avatar", un cuerpo azul, de tres metros en el que depositar tu mente sin limitaciones. La escena en la que el marine parapléjico Jake Sully despierta como Avatar y comienza a correr, explorando las posibilidades de su nuevo físico es sencillamente genial. ¿Quien no querría algunos días cambiarse de cuerpo, especialmente los días de resaca? Por un momento uno tiene la impresión de que va a asistir a una obra maestra, pero la promesa se queda en eso. Muy pronto la historia se mete en los muy convencionales y previsibles caminos de una historia trillada y un tanto plomizo. El contraste entre humanos y Na´vis, tecnología y naturaleza, deja paso a una sobredosis de azul, una mezcla con todo el barniz de un videjuego de "El ultimo mohicano", "Bailando con lobos", "Abyss" y "Aliens, el regreso". Los personajes tienen la misma profundidad que los Gijoes, en este sentido es una pena ver como se desaprovechan actrizes maravillosas como Michelle Rodríguez y especialmente Sigourney Weaver, que trata de dar algo de credibilidad a su doctora especialista en botánica. James Cameron parece más interesado en sus -como alguien ha escrito acertadamente- "pitufos perroflautas y neoraveros" digitales, con un mensaje ecologista más bien simplón. Por otra parte la película dura casi tres horas y uno tiene la sensación de que -como viene pasando ultimamente- si se le quita media horita hubiera quedado mucho más dinámica. Quiero decir que en momentos de supuesta épica y emoción me vi a mi mismo pensando en que iba a cenar esa noche. Y es una pena, porque es evidente que la película va a reventar taquillas, tendrá secuelas y merchandising pa dar y regalar, pero uno se queda con una especie de coitus interruptus, sabiendo que "Avatar" podría haber sido la nueva Guerra de las Galaxias, pero que la deshumanización de sus personajes, su escaso sentido del humor y su fallido guión, la colocan a años luz de una galaxia muy muy lejana...

CINE DE TERROR

Cuando en determinadas situaciones confieso que uno de mis géneros favoritos es el terror, hay gente que me mira como si estuviera delante de un psicópata en potencia, como si eso demostrara que tengo un gusto enfermizo o un subconsciente descuartizador latiendo bajo mi cara de buena persona. Mi padre, sin ir más lejos, nunca lo ha entendido. (Ya he dado por perdida la batalla de hacérselo entender) Siempre me dice: ¿Como puedes ver esas cosas? ¡Que horror! Pero es de lo que se trata amigos...Cuando era chico, pongamos unos 10-12 años, me iba con mi amigo de la infancia al Videoclub Elio de Cádiz, que tenía una suculenta estantería llena de bodrios, subproductos, series B y hasta Z y alguna que otra película decente. Nos alquilábamos una o dos películas por 250 pesetas y nos preparábamos a pasar una tarde de miedo. En esa época vimos pelis tan malas, con argumentos tan peregrinos o efectos especiales tan de baratillo que creo que fue una forma de perderle el respeto a este género, a la vez que le cogía un cariño a veces inexplicable, pero desde luego inquebrantable. Recuerdo una de estas pelis en las que al monstruo, por alguna ocurrencia genial del guionista, se le metaba con refresco de limón (?). Muchas veces me he cuestionado porque me gusta tanto este tipo de cine. Creo que el terror es el género más "cinematográfico", el que ha codificado más sus "tics". La ambientación, decorados, banda sonora, los clichés en definitiva, me resultan entrañables, como entrar en una atracción de feria cutre pero deliciosa, llena de polvo y telarañas, de puertas que crujen, sombras amenazadoras, terrorificas nanas infantiles, cementerios cubiertos por la niebla de turno, con tumbas invadidas por el musgo . Si os digo la verdad pocas películas de miedo me provocan verdadero desasosiego. (Otra cosa son los sustos, facilones y poco meritorios) Pero me fascinan, me divierten y me reconfortan, que de eso trata esto del cine. ¿Soy un psicópata? No, tan solo soy un sentimental...